viernes, marzo 02, 2007

La venta de Absolut

El Estado sueco quiere vender Absolut y su casa matriz, V&S Vin & Sprit AB, junto con otras cinco empresas en las que tiene una participación significativa. El gobierno solicitará hoy la aprobación parlamentaria para desprenderse de V&S.

Con un precio aproximado de 40.000 millones de coronas suecas (u$s5.700 millones), entre los posibles compradores que pagarían esa suma por adquirir Absolut –el primer vodka de importación en los Estados Unidos y cada vez más popular en mercados como Brasil– figuran Diageo, Pernod Ricard y Fortune Brands, que tiene ya un acuerdo de distribución con V&S.

“Lo que importa es sacar el mejor precio posible”, dijo a The Associated Press el ministro de Mercados Financieros sueco, Mats Odell.

El grupo bancario Nordea AB, la empresa de telecomunicaciones TeliaSonera AB, la operadora de Bolsa OMX AB, la empresa de bienes raíces Vasakronan AB y la hipotecaria SBAB han ayudado al gobierno de Suecia a pagar sus abultadas deudas.

Es el mayor cambio ideológico en este país intensamente socializado desde que el gobierno de coalición de centroderecha desalojó del poder en octubre a los socialdemócratas, que favorecían uno de los mayores estados de bienestar social de Europa.

Sin embargo, la venta de V&S es especialmente delicada ya que la empresa fundada en 1917 ha estado estrechamente ligada con las gestiones del Estado para controlar el consumo de bebidas alcohólicas en Suecia.

El gobierno ejerce el monopolio en la venta de dichas bebidas desde mediados del siglo XIX y Suecia pudo mantener el sistema incluso después de sumarse a la Unión Europea en el 1995, por razones de salud pública.

“No creemos que el Estado debería regentar una empresa en un mercado competitivo”, dijo Odell. “El Estado no debería fabricar, vender o distribuir vodka.”

El vodka no es sólo cuestión de tradición, sino también un importante negocio a nivel mundial: las ventas anuales rondan los u$s12.000 millones.

El consumo mundial se sitúa en los 4.500 millones de litros al año, de los cuales 11% corresponde a Europa y 57% a Rusia. La región del Báltico, los países nórdicos y Polonia producen 70% de todo el vodka europeo, del que consumen 64 por ciento.

Al margen de la Unión Europea, los Estados Unidos es asimismo un gran importador y exportador de vodka a nivel mundial, que elabora también a partir de caña de azúcar.

La industria estadounidense ya ha advertido que se enfrentará a la Unión Europea ante la Organización Mundial del Comercio si se aprueba una definición muy restrictiva del vodka, ya que ésta podría suponer una traba ilegal para el comercio.

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